67. HALLÉ UN BUEN AMIGO

1. Hallé un buen amigo,
mi amante Salvador
contaré lo que Él
ha hecho ya por mí.
Hallándome perdido,
e indigno de su amor,
me salvó y ya me guarda para sí.

Me salva del pecado,
me guarda de satán,
promete estar conmigo hasta el fin.
Él consuela mi tristeza,
me quita todo afán,
grandes cosas, Cristo,
consumó por mí.

2. Jesús jamás me falta,
jamás me dejará,
es mi fuerte y poderoso protector.
Del mundo yo me aparto
y de toda vanidad,
para consagrar mi vida a mi Señor.

Si el mundo me persigue,
si sufro tentación,
confiado en Cristo puedo resistir.
La victoria me es segura,
y elevo mi canción,
grandes cosas Cristo
consumó por mí.

3. Yo sé que Jesucristo
muy pronto volverá
y, entretanto, ya me tiene un hogar.
En casa de mi Padre,
mansión de luz y paz,
do el creyente fiel,
con Él ha de morar.

Llegando a la gloria
con Él yo estaré.
Contemplaré su rostro siempre allí.
Con los santos redimidos
gozoso cantaré.
Grandes cosas Cristo
consumó por mí.

HALLÉ UN BUEN AMIGO